El kéfir de agua tiene unas propiedades con efectos superiores al kéfir de leche. Se puede tomar en mucha más cantidad (1 a 2 litros día). Se elabora con: 2 l. de agua, 4-6 cucharadas de azúcar moreno, 6 cucharadas de nódulos de kéfir, 2 higos secos (también pueden ser dátiles u orejones de melocotón), 1 limón, partido en cuatro trozos. Se introduce todo los ingredientes en un recipiente de cristal con cierre hermético. Se agita bien durante un minuto. Se deja de 24h a 36h siendo el de 24h con propiedades reguladoras de los intestinos. El de 24h es laxante. Cada día la fermentación aumenta y el kéfir crece mucho. Tiene un sabor muy agradable, algo espumoso con finas burbujas. Se guarda en el frigorífico.
Se debe tomar en ayunas o antes de las comidas. La cantidad depende de la persona; intentar tomar de tres a seis vasos al día, hasta encontrar la cantidad correcta para cada uno.Se usa como preventivo general (regula las funciones de los intestinos) y puede mejorar o curar enfermedades tan diversas como: Sistema nervioso, úlceras de estómago, asma, catarros, anemias, alergias, eccemas, hepáticas.
Fuente: ECOALDEA.
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