EL PARACETAMOL

Diccionario de Medicina OCÉANO MOSBY

Paracetamol: (Acetaminofeno) Analgésico y antipirético perteneciente al grupo de los derivados del paraaminofenol: es el n-acetil-p-aminofenol. Sustituto ideal del ácido acetil salicílico con fines analgésicos y antipiréticos cuando éste no puede darse.

Indicaciones: Suele prescribirse para combatir el dolor y la fiebre leves o moderados.

Contraindicaciones: Hipersensibilidad conocida a este fármaco.

Efectos secundarios: Entre las reacciones adversas más graves se encuentran la anafilaxis y la anemia hemolítica. La sobredosificación puede provocar una necrosis hepática fatal.

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Paracetamol: Comercializado originalmente en 1955 para el alivio del dolor y la fiebre infantil, el paracetamol (conocido en otros países como acetaminofén) se convirtió en un fármaco de venta sin prescripción en 1960. El paracetamol, que no forma parte de los AINE (antiinflamatorios no esteroides), es más o menos comparable a la aspirina en cuanto a su capacidad de aliviar el dolor y en su acción antitérmica.

Aunque el paracetamol apenas produce reacciones adversas en el estómago, el consumo de grandes dosis de forma prolongada puede tener algunos riesgos, incluido el de lesión hepática.

Muchos productos de venta sin prescripción contienen paracetamol, como son los remedios para la alergia, el resfriado, la tos, la gripe, el dolor y los problemas de sinusitis, para evitar una sobredosis, el usuario debe comprobar cuidadosamente el prospecto del fármaco y evitar el consumo simultáneo de varios productos con paracetamol.

El paracetamol se administra por vía oral o en supositorios y su acción dura, generalmente, de 4 a 6 horas. Las dosis elevadas pueden causar un daño hepático irreversible. Las personas con trastornos del hígado deben utilizar dosis más bajas que las corrientes. No se sabe si tomar dosis bajas durante largo tiempo puede causar daño al hígado. Los consumidores de cantidades elevadas de alcohol tienen un alto riesgo de sufrir un daño hepático con el uso de paracetamol a grandes dosis. Las personas que están tomando paracetamol y dejan de comer por causa de un fuerte resfriado, una gripe u otro motivo, pueden ser más vulnerables al daño hepático. La ingestión de dosis elevadas de forma prolongada puede provocar daños renales.

Intoxicación por paracetamol: Más de cien productos contienen paracetamol, un analgésico que, por lo general, se vende sin prescripción médica. Si se consumen a la vez varios productos farmacéuticos similares, es posible tomar demasiado paracetamol inadvertidamente. Muchos preparados destinados a uso infantil están disponibles en forma líquida, en comprimidos y en cápsulas, y puede que los padres administren varios preparados simultáneamente o espaciados en varias horas, sin darse cuenta de que todos contienen paracetamol. Habitualmente, el paracetamol es un fármaco muy seguro, pero no es inofensivo. Para ocasionar una intoxicación, tendría que ingerirse varias veces la dosis recomendada de paracetamol. Por ejemplo, una persona que pese 70 kg por lo general necesita tomar al menos trece comprimidos de 500 mg antes de presentar efectos tóxicos debido a una sola sobredosis. A dosis tóxicas, el paracetamol puede lesionar el hígado e incluso provocar insuficiencia hepática.

Síntomas y diagnóstico: La mayoría de las sobredosis no producen síntomas inmediatos. La concentración de paracetamol en sangre, medida en las 2-4 horas posteriores a la ingesta, predice con precisión la gravedad de la lesión hepática. Si la sobredosis es muy importante, los síntomas se desarrollan en cuatro estadios. En el estadio 1 (al cabo de varias horas), la persona puede vomitar, pero no parece estar enferma. Muchas personas no manifiestan síntomas hasta el estadio 2 (después de veinticuatro horas), cuando pueden producirse náuseas, vómitos y dolor abdominal. En esta fase, los análisis de sangre revelan que el hígado está funcionando de modo anormal. En el estadio 3 (después de 2-5 días) empeoran los vómitos. Los análisis revelan una función hepática escasa y aparecen ictericia y hemorragias. En el estadio 4 (después de cinco días), o bien el intoxicado se recupera rápidamente o bien experimenta una insuficiencia hepática que puede ser mortal.